El “Seguro de Automóvil” puede ser definido como un contrato, realizado a través de una compañía aseguradora o corredora de seguros, que tiene por objetivo cubrir los riesgos creados a partir de la conducción de vehículos en caso de ocasionar un accidente.

En República Dominicana, al igual que en muchos otros países, es obligatorio por ley que todo automóvil cuente con un seguro básico, denominado popularmente como “Seguro de Ley”, el mismo cubre la responsabilidad civil del propietario y del conductor del vehículo — en caso de que no sean la misma persona— por los daños y lesiones que causen a terceros. Incluye también la defensa jurídica hasta ciertos límites. Esta modalidad está regulada de forma detallada por la normativa estatal.

Anteriormente hemos mencionado un término de suma importancia, “Responsabilidad Civil”, este se refiere a la parte del seguro que cubre al asegurado frente a las lesiones que cause a terceras personas y los daños a la propiedad ajena que ocasione y pudieran llevarlo a reclamaciones.

Si se desea también ser protegido contra los daños al propio vehículo es necesario contratar una “Póliza de Daños”, estas pueden cubrir desde colisiones hasta vuelcos, incendios y robos.

La importancia de este tipo de Seguros recae en el margen de riesgos que se toma al salir a conducir y la necesidad de que el conductor se sienta confiado en que sin importar que suceda cuando “salga” todo estará bien y podrá obtener una solución rápida y eficiente a sus problemas, de presentarse.

En la próxima entrega abundaremos un poco más acerca de las pólizas de daños.